Estudiantes de Psicogerontología en el Hospital
Recuperamos la experiencia de tres estudiantes de la Tecnicatura Universitaria en Psicogerontología de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER) en su trayecto de prácticas por el Hospital Escuela
Horacio Nicolás Montiel, Anabella Castellanos y Sofía Percara son estudiantes de la Tecnicatura Universitaria en Psicogerontología y se encuentran realizando sus prácticas en el Servicio Integral de Personas Mayores (SIPeM) de nuestro hospital.
Acerca de cuánto conocían de nuestra institución, las y el estudiante referencian que sabían poco del hospital o casi nada. Sus tránsitos anteriores se vinculaban con Centros de Salud. Aún así, referencian que nuestro hospital es muy pedido y querido por las y los estudiantes para hacer sus prácticas formativas.
“Creemos que es un lindo espacio para ir haciéndonos camino en la carrera, es algo que nos nutre el pasar por estos espacios que tienen tanta trayectoria, tanta lucha. Destacamos que haya una técnica en el mismo SIPeM, como es Stella Ferrari. La verdad que nos enorgullece, ya que salió de nuestra casa de estudios. Stella es nuestra referente de prácticas acá en el SIPEM” explicó uno de los estudiantes.
En la conversación los tres practicantes ubican el cambio de paradigma que viene realizando tanto el SIPeM como el hospital, sus transformaciones y movimientos a la par de la Ley Nacional de Salud Mental.
La práctica que realizan las y los estudiantes de la carrera de Psicogerontología es de cuatro meses en total. ¿Qué han hecho en estos dos meses que han transitado el hospital?
“En el SIPeM hay un cronograma de actividades cada día. Los lunes en particular es el día de estimulación cognitiva y ahí estamos nosotros, a veces proponiendo algunas dinámicas y actividades. Empezamos con una primera etapa de nuestra práctica, más que nada como observación participante, una familiarización con la institución y después, de a poco, fuimos teniendo un poco más de participación, acompañando a los talleres, eligiendo las actividades."
Tuvieron, en medio de su práctica, una efeméride importante para el campo específico de trabajo para el que se forman: ¿Cómo fue la actividad que realizaron para el 1 de octubre?
“En esta fecha, Naciones Unidas decretó la conmemoración del Día Internacional de las Personas Mayores. Nos pareció interesante no pasar por alto este día tan significativo y hacer una salida con los usuarios a repartir folletos que diseñamos específicamente. La idea era hacer un folleto que brinde información, pero también la queríamos hacer desde y para los usuarios, que tenga doble efecto, no solamente la idea de poder visibilizar y tomar conciencia del 1 de octubre sino también que haya una participación activa y autónoma por parte de los adultos mayores”, relata uno de los estudiantes.
Entre las tareas que estos futuros técnicos en psicogerontología definieron en el marco de sus prácticas y de la fecha citada se apuntó el visibilizar el lugar del SIPeM.
“Se trata de un lugar importante, que tiene todo un entramado. Hay usuarios y usuarias que han pasado prácticamente la mayoría del tiempo acá y siguen estando. Nos parece importante el reconocimiento del espacio y su importancia. Hay mucho trabajo: los talleres, generados a través del interés de los propios usuarios y de lo que los va convocando. Esto lo vinculamos con el modelo de atención centrado en la persona, tal y como lo vemos en nuestra carrera. Significa poder conocerlos, saber de su biografía, sus intereses, su historia y su subjetividad en el marco de lo sociocomunitario. Nos parece re bueno poder traer a colación todo eso en un día importante como éste, que debe ser considerado, como el día de la salud mental, que también es un día emblemático”.
Los prejuicios sobre la vejez fueron otro de los tópicos abordados en la conmemoración del Día Internacional de las Personas Mayores:
“Nosotros en nuestra carrera y como futuros técnicos, tenemos muy presente esta cuestión de los estereotipos, de las representaciones sociales que se juegan en cuanto a la vejez, al envejecimiento, los prejuicios que son muy marcados en esta etapa de la vida, así que también trabajamos desde ese lugar con la sociedad, con las personas, trabajando desde lo que llamamos el viejismo, este prejuicio a la vejez. Trabajamos con esos estereotipos para trabajar en una inclusión social para una población que ha sido vulnerada.”
¿Cómo se están sintiendo en esta mitad de su práctica, cómo creen que los han recibido en el hospital y en el SIPeM?
“Nos vamos sintiendo como con más pertenencia, como que de a poco nos fuimos dando lugar. Al principio nos sentíamos como extranjeros, decíamos a ver con quién nos vamos a encontrar, cómo va a ser el funcionamiento con los usuarios, los profesionales, qué va a surgir ahí con estos nuevos practicantes… y de a poco nos fuimos dando un lugar, fuimos habilitándonos a hacer, a dar nuestras opiniones, con nuestra propia manera de decir, de abordar y demás… La cuestión de la habilitación por parte del equipo ha sido muy importante. Más que nada de Luciana y Stella, que son con quienes compartimos todos los lunes en el espacio de estimulación. Siempre hay predisposición para que nosotros estemos ahí aportando. Desde el primer momento hubo amabilidad para que nos vayamos haciendo camino en nuestra práctica e inclusive más, como esto de poder generar una actividad, que es un montón, estar ahí guiándonos. Eso se valora porque, más allá de que entendemos que son nuestras referentes acá en la institución, ellas también están haciendo su labor acá y que nos dediquen tiempo de su trabajo es buenísimo. Nos abrieron las puertas y estamos re contentos”.