El 21 de septiembre las enfermeras y enfermeros se unieron en una marcha hacia Casa de Gobierno. La compañera Daniela Páez, enfermera y magister en salud mental nos explicó cuáles son los lineamientos de los reclamos establecidos.

Los ejes del reclamo son: recomposición salarial, tratamiento de la Ley de Carreras, pase a planta, reducción del horario para quienes que se encuentran trabajando en áreas críticas. Todo esto, sumado a las necesidades particulares del contexto de pandemia.

Pero: ¿a qué refieren estas particularidades, si todos los trabajadores y trabajadoras de salud atraviesan las exigencias de estar al frente en esta pandemia? ¿Por qué enfermería se forja como colectivo y encara esta manifestación?

Daniela, recupera la historia de la enfermería y cómo ésta se ha ido transformando:

"Hoy la enfermería tiene una formación bajo un cuerpo científico que la pone de cara a nuevas responsabilidades y acciones en sus lugares de trabajo. Junto a estos cambios aparecen nuevas necesidades desatendidas."

En este contexto particular de pandemia, enfermería es uno de los cuerpos profesionales más sobre exigidos.  Y esto se traduce en desgaste emocional y físico.

En paralelo a los reclamos se habilitaron las licencias profilácticas: “la habilitación de las profilácticas es resultado de la constante demanda que se sostuvo”. Esto podría haber sido motivo de celebración para las y los compañeros de enfermería pero en este momento crítico no hay recurso profesional suficiente para cubrir las suplencias de quienes se tomen descansos.  

“En Entre Ríos formamos profesionales de enfermería pero emigran hacia otras provincias por los mejores  salarios. Además, muchos enfermeros y enfermeras se encuentran aislados por resultar positivo en el test por COVID, como consecuencia de la exposición propia de su trabajo. En este contexto, de necesidad de cuidado extremo a los usuarios y usuarias, no hay suficientes profesionales que suplan las licencias”, explicó Páez.

Además, hay que tener en cuenta que el colectivo de enfermería, a diferencia del resto de los profesionales, no ha podido rotar hasta la fecha, trabajando sin descanso ni relevos desde el comienzo de la pandemia.

Sumado a este contexto particular, los reclamos también se dirigen hacia la recomposición salarial, es decir, ajustar los sueldos que se encuentran muy por debajo de lo que debería ser y que conllevan al doble empleo de los y las compañeras.

Otro de los pedidos refiere a la urgente necesidad de pases a planta.

“Enfermería tiene un índice muy alto de suplentes. Esto impacta a la hora de la toma de licencias de los enfermeros y enfermeras suplentes para quienes no se pueden pedir suplencias, reduciéndose así la planta e impactando en la calidad de atención y en la salud de las enfermeras y enfermeros que se recargan del trabajo” explica Daniela.

Así mimso, urge el tratamiento del proyecto de Ley de Carreras, el que data del año 1997. Daniela refiere:

 “Enfermería avanza y quedan obsoletas algunas cuestiones, por ejemplo, el pago del título. El personal de enfermería se sigue formando y capacitando, pero no se reconoce esta formación”.

Este proyecto tiene media sanción en Diputados y hace 4 años se encuentra en tratamiento. Enfermería entiende que este plazo ha sido suficiente para su tratamiento y exige la media sanción pendiente con carácter de urgente. 

"Esta ley permitiría, entre otras cosas, reorganizar el pago de título y las especialidades e incluir a los enfermeros y enfermeras en las recategorizaciones del tramo correspondiente."

Finalmente, solicitan la creación, a nivel Ministerial, de la Dirección General de Enfermería para que atienda las problemáticas puntuales y organice el funcionamiento disciplinar, nucleando leyes de ejercicio profesional y protocolos, ordenando y ajustando las prácticas de enfermería a la especificidad de cada institución.

Reconocemos en nuestro hospital el aporte invaluable de enfermería, el sostenimiento diario del cuidado de quienes buscan atención en nuestra institución y apoyamos su lucha, que no deja de ser, la lucha de todos y todas.