Otros modos de atención en Salud Mental son posibles
Una experiencia llevada adelante por el equipo de salud del Centro de Salud Goldin.
¿Es la atención individual la única forma de dar respuesta a la necesidad de escucha y tratamiento?
Recogimos, cual aguja en un pajar, una experiencia llevada adelante por el equipo de salud del Centro de Referencia en Atención Primaria Dr. Selig Goldin. Se trata de una articulación desarrollada durante 2018 (mayo-septiembre), junto a la escuelas de la zona y las vecinales. Conversamos con la trabajadora social, Antonella Rodríguez Calderón, la psicóloga Constanza Fernández y la fonoaudióloga Delfina Cabrera Lacorazza.
La Demanda
Constanza: Veníamos de una situación en la que teníamos lista de espera y comenzaron a aparecer un montón de situaciones que tenían como eje dificultades en el comportamiento en la escuela. Todo llegaba en carácter de urgente. Fue así que en base a esta demanda generamos la propuesta de trabajar todas esta situaciones en forma grupal y en la escuela con los padres, madres y docentes. En lo que respecta a psicología, si bien, ninguna de las profesionales que conformamos el equipo tenemos especialidad en niños, encontramos de esta manera una oportunidad para dar respuesta a la demanda y, al mismo tiempo trabajar en el fortalecimiento institucional que es una de las tareas de la atención primaria.
La demanda provino de la Esc. María Reina Inmaculada. Advertimos que dando turnos no podríamos, porque eran muchos. Entonces pensamos:
¿Qué tema podemos proponer que reúna a todos y que nos permita relevar las problemáticas?.
Delfina: Es tanta la demanda de atención en consultorio que aparece como urgente, que a veces debemos quitarle tiempo a la prevención y promoción. Las derivaciones que recibimos son de la escuela, pediatras y del hospital. También de otros centros de salud de la zona que no cuentan con colegas en sus efectores.
Vimos una posibilidad en el trabajar en otro ámbito. Había muchas temáticas comunes y que les interesaba a las mamás y papás que participaron.
La intervención
Antonella: En principio, como Centro de Salud de Atención Primaria, nuestro foco está puesto en hacer prevención y promoción de la salud. Esas son nuestras incumbencias. Sin embargo, muchas veces, en la mayoría de los casos, nos encontramos atendiendo urgencias.
Con esta experiencia pudimos cortar, al menos un poco, con una práctica consolidada en todo lo que es salud mental, que es la atención en consultorio. Esas intervenciones están buenas en otros niveles de atención. Nosotros tenemos un margen de otras intervenciones al estar enfocados en la prevención y tenemos un trabajo de muchísimos años, que excede a cada una de nosotras, que es que la comunidad se siente identificada con este Centro de Salud.
Se nos dificulta con las intervenciones más complejas porque no contamos con los recursos o porque no es la premisa de este nivel de atención. Tenemos que ver cómo derivar, no desde el lugar que no nos corresponde, sino para una mejor atención de esa persona.
Este acercamiento que tenemos con la comunidad, nos permitió hacer una lectura que develó el pedido de la escuela para que los chicos consulten y pudimos pensar otras intervenciones.
Lo grupal
Vimos que la mejor propuesta era armar algo grupal y, aparte, trabajarlo en el lugar donde se estaba generando esta demanda. No iba a llegar toda la gente si nosotros decíamos: “vengan”. Además, queríamos aprovechar esa intervención para abrir otras cuestiones que pudieran suceder, como pasa en una admisión. No necesariamente es un proceso psicoterapéutico, sino a lo mejor es una demanda que ahí mismo se puede empezar a resolver.
Así lo pensamos y así armamos un taller, destinado a los padres y madres, que tenía como finalidad la puesta de límites y todas las cuestiones que vinieran en relación a esto. Fuimos armando determinados pasos para saber cómo era y qué cosas se podían implementar, nos apoyamos en los procesos de la psicoterapia cognitiva conductual.
Cuando hablamos de conducta, hablamos de qué le pasa al niño y qué relación tiene con lo que está viviendo en la casa y qué cosas podíamos hacer y co-construir con los padres y madres.
Para nuestra sorpresa, tuvo buena respuesta y se logró una continuidad.
Antonella: Además de consolidar un grupo y sus vínculos, logramos pensar resoluciones en conjunto, compartir experiencias. Frente a esto: cómo contener y acompañar a sus hijos en lo que les está pasando.
La demanda puntual de la escuela era: El niño no tiene límites, no escucha, no habla! Entonces dijimos; veamos qué está pasando y evaluemos la posibilidad de ir a la escuela y ver el contexto. Uno puede tener otra lectura y puede pensar otra manera de dar respuesta a la población sin que tengan que venir siempre al CAPS. Uno, mirándolo desde el CAPS pierde muchos elementos.
Delfina: En algunos encuentros, las mamás no tenían con quién dejar a los niños y entonces veíamos cómo se desarrollaba la relación mamá y niños en el lugar. Fue bueno advertir cómo se sentían las mamás y los papás. Ver que no estaban solos en lo que les pasaba, que había otros y que los estamos acompañando.
Constanza: Fue una forma de diferente de asistir y dar respuesta, a través de un taller. Vino como un pedido de asistencia y lo pensamos estratégicamente para que fuera además, preventivo. la intención fue la de generar algo diferente dentro del ámbito escolar y que puedan potencias sus propios recursos y estrategias dentro de ese escenario.
El consultorio
Delfina: Trabajamos y nos interrogamos sobre esa idea de que el problema está en el niño y que se resolvía con él en el consultorio.
Constanza: Nos preguntamos por lo que implica para un niño esta secuencia: Me porto mal, me llevan a la Dirección y me mandan al psicólogo.
Siempre me encuentro con esa realidad. Hablo con un niño y le digo que no tiene la obligación de venir. Me parece fundamental dejar claro que el de psicología, es un espacio al que pueden llegar por sugerencia del colegio o profesionales, pero al que se accede voluntariamente y con el fin de pensar y revisar las situaciones que generan el malestar, de lo contrario
se pierde el recurso para el día de mañana. El consultorio se transforma en parte de un castigo.
La pos intervención
Antonella: La demanda cesó. Cuando vemos que se repiten situaciones, nosotros recurrimos a la escuela.Tenemos muy buena relación con las escuelas de la zona.
Constanza: Esto permitió que hoy podamos tener una charla, una conversación y no necesariamente una derivación. No llegan más con el papelito diciendo urgente.
Tenemos pensado, a futuro, seguir en esta misma línea y cada vez más corrernos de la asistencia. Por otro lado, el pedido de la asistencia sigue estando, lo bueno es que estamos pudiendo espaciar los turnos, para poder dar lugar a más personas. Es otro el movimiento y la conciencia de intervenir en lo necesario.