División de Extensión Comunitaria y Epidemiológica.
Estas entrevistas buscan recuperar el trabajo y las experiencias que se realizan en el HESM en el marco de la Ley Nacional de Salud Mental.
Estas entrevistas pretenden recuperar el trabajo y las experiencias que se realizan en el Hospital Escuela de Salud Mental en el marco de la implementación de la Ley Nacional de Salud Mental.
A 12 años de la sanción de la Ley 26657, advertimos que aún falta mucho en el camino de su implementación. Por tal motivo, hacemos hincapié en aquellas experiencias que sí se han podido llevar adelante siguiendo los objetivos de la misma.
En esta ocasión conversamos con la Licenciada en Trabajo Social y Magíster en Salud Mental, Delfina Recalde y la Terapista Ocupacional, Natalia Peter, ambas coordinadoras de la División Extensión Comunitaria y Epidemiológica del Hospital Escuela de Salud Mental (HESM).
De las prácticas alternativas al trabajo intersectorial
En el marco de un proceso de transformación del paradigma de salud mental, en los años 2000 e impulsado por la posterior sanción de la Ley Nacional de Salud Mental, el HESM transforma su funcionamiento. Los servicios que históricamente trabajaban por disciplinas, pasan a conformar equipos interdisciplinarios. Por ejemplo, los servicios de Trabajo Social o de Terapia Ocupacional, se convirtieron en dispositivos interdisciplinarios como el DAPs (Dispositivo de Atención Psicosocial) o el, por entonces, Área de Extensión Comunitaria.
El área de Extensión Comunitaria tuvo sus comienzos en el año 2006, pero fue en el 2010 que se convocó a la conformación de un equipo interdisciplinario para continuar con el trabajo de prácticas alternativas que se desarrollaban en el hospital. Así, se conformó la actual División de Extensión Comunitaria y Epidemiología que comenzó a trabajar en territorio haciendo pie en los CAPS (Centros de Atención Primaria de la Salud), articulando acciones entre el hospital y la comunidad desde una perspectiva de derecho.
Actualmente integran el equipo profesionales de terapia ocupacional, psicología, trabajo social y enfermería, además de residentes y estudiantes. En el trabajo en territorio, este equipo conforma uno ampliado. Se suman a la tarea personas trabajadoras y referentes de la comunidad que potencian las intervenciones individuales o colectivas.
El territorio es el primer recurso terapéutico.
El objetivo de la extensión comunitaria es favorecer la relación dinámica entre el hospital y la comunidad desde una perspectiva que busca garantizar el derecho a la salud, desde una mirada integral.
“El usuario es uno de la red y son los servicios existentes en ella, los que deben organizarse para garantizar la atención, en cualquier momento del proceso salud/enfermedad en que se encuentra”.
No solo se trabaja con el sujeto individual, sino con colectivos, grupos de un determinado territorio, de una escuela, de un merendero, etc.
“El eje es la territorialidad. El trabajo comunitario es muy amplio pero para una mejor organización se delimita un mapa para pensar las intervenciones individuales o los abordajes de promoción y prevención”.
En este caso el territorio es la ciudad de Paraná, dividida en 4 áreas programáticas con su Centros de Salud de Referencia y los Centros de Atención Primaria en Salud (CAPS) de la zona. Cuando llega una situación, lo primero a observar es al área programática y advertir cuál es el CAPS al que corresponde.
Así como la Ley Nacional de Salud Mental plantea que la internación es el último recurso terapéutico, el territorio es el primer recurso terapéutico.
Esto cambia la modalidad de atención hacia adentro del hospital, ya que el usuario puede comenzar un tratamiento sin la necesidad de llegar hasta la institución.
El modelo de Atención Primaria de la Salud funciona como ordenador de la tarea. Ir al territorio implica que muchas personas usuarias no necesiten llegar al hospital, evitando, por ejemplo, una orden judicial que implique una atención compulsiva por guardia. Algo contraproducente para el usuario y la comunidad, ya que refuerza la idea de peligrosidad.
“A veces la solución se da sin la necesidad de llegar al hospital, sino en coordinación con las instituciones que conocen el territorio”.
Este trabajo articulado es fruto de años de coordinar acciones con las trabajadoras y trabajadores de la atención primaria. Antes, se entendía que los abordajes en salud mental debían hacerlos los equipos del hospital. Solo se limitaba la intervención a la medicación, al psicólogo o psiquiatra, no habiendo lugar de incumbencia para los CAPS. Hoy se ha avanzado en un planteo de trabajo intersectorial, donde se entiende que la salud mental es parte de la salud integral de las personas.
En este punto también, es necesario decir que muchas veces las personas trabajadoras se encuentran ante situaciones sin los recursos necesarios. Se advierte la ausencia de equipos de atención en crisis, donde la intervención, en gran mayoría, es por parte de la policía.
Para abonar el trabajo en territorio, es necesario profundizar la promoción, el conocimiento de la ley de salud mental, trabajar sobre las representaciones en relación a la locura, el armado de recursos. Esto permite reforzar lazos con APS (Atención Primaria de la Salud)
Redes intersectoriales
Las mismas complejidades de las situaciones, ameritan la necesidad de pasar de un trabajo interinstitucional a uno intersectorial. Así se comenzó con el armado de redes, a veces microredes, para situaciones singulares. Otras veces, son redes más armadas con otras instituciones.
Por la ubicación geográfica del HESM, al equipo de Extensión Comunitaria le corresponde la red noreste, en la cual viene trabajando desde el 2016.
La red propone el trabajo articulado de las instituciones de la zona para abordar las distintas problemáticas de la población de un modo integral. La misma está compuesta por CAPS, escuelas, comisiones vecinales, comedores, organizaciones sociales y demás actores de la vida comunitaria.
Kermes por la salud mental.
Esta actividad se desarrolló durante los meses de octubre y noviembre en distintos puntos de la red. Surgió del trabajo conjunto entre la cátedra Salud Mental, Campo y Supuestos, de la Licenciatura en Trabajo Social (UNER) y el equipo de Extensión Comunitaria, en coordinación con las escuelas, CAPS y demás instituciones de la zona.
Esta iniciativa propone que todas las personas puedan ver cómo la salud mental se vincula con las condiciones de vida y la posibilidad de acceso a derechos. Busca derribar algunos mitos que ligan a la locura con la peligrosidad, con el encierro y la medicación.